Engge Chavarría
Científicos estadunidenses han desarrollado un fármaco que podría evitar el contagio del sida, y evitar que crezca este padecimiento
En los 25 años que la ciencia lleva luchando por una vacuna contra el VIH, todos los intentos han sido fallidos. Sin embargo, las expectativas podrían revertirse con una tableta que reduciría el riesgo de contraer el Virus de Inmunodeficiencia Humana.
La estrategia fue bautizada como Profilaxis de preexposición (PrEP, por sus siglas en inglés), la cual consiste en que el paciente consuma una tableta cada día elaborada con las mismas sustancias que las pastillas antirretrovirales que consumen hoy los seropositivos. Esto implicaría una tercera parte menos de probabilidades de contraer el virus, aún cuando se practiquen relaciones sexuales de alto riesgo, informó la revista New Scientist.
Actualmente científicos estadunidenses están probando la tableta en algunos pacientes, sin embargo, según la publicación, esto podría cambiar pronto.
El tratamiento consiste en una combinación de dos fármacos: el tenofovir disoproxil fumarate que puede ser utilizado sólo o combinado con la llamada emtricitabine. Comparado con otros medicamentos antiretrovirales, según la revista científica, ambas sustancias tienen efectos secundarios menores (náuseas, fatiga y mareos, entre los más comunes).
La esperanza es que cuando se usen de manera preventiva, los antirretrovirales inhibirán la replicación del virus, además de que el sistema inmunológico podría eliminarlo y prevenir el desarrollo del Sida, explicó la publicación.
“Hay muchos rumores sobre la PrEP. Sin embargo, hay un optimismo cauteloso de que va a funcionar”, dijo Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias e Infecciones Mortales del Instituto Nacional de Salud en Maryland, Estados Unidos.
Esto podría frenar la propagación de la pandemia, la cual contagia a siete mil personas cada día en todo el mundo. Incluso, sugirieron los doctores, podría utilizarse durante las relaciones sexuales de alto riesgo, aunque no a diario.
Si alguien acostumbra a tener sexo inseguro los fines de semana, entonces deberá tomar la tableta únicamente los viernes, sábados y domingos, según la publicación.
Uno de los temores que aquejan a la comunidad de científicos que prueban el medicamento, es que mientras se difunde la PrEP, la sociedad adquiera una falsa impresión de seguridad, orillándola a prácticas inseguras de riesgo, lo que dispersaría más rápidamente el virus.
“Tenemos que explicarle a la gente que esto no es un sustituto de los condones, sino un agregado de éstos”, comentó el doctor Lynn Pastón, quien encabeza la investigación de PrEP en el centro de Control de Muerte y Prevención, en Atlanta, Georgia.
Sin embargo, Bob Grant, investigador de la Universidad de California, consideró que la respuesta colectiva podría ser otra. “PrEP podría poner a la gente en una diferente forma de pensar. Cuando alguien toma una pastilla al día, se acuerda que tiene riesgos”.
Sin embargo, según los médicos, el miedo con el fármaco es que algunos usuarios podrían ser seropositivos sin saberlo, y como la PrEP sólo incluye dos fármacos, haría más resistente al virus.
“Estas personas podrían ser una fuente de infección para otros en el tratamiento”, según la revista.
Según la cadena británica BBC, actualmente se sigue la misma estrategia para personas que están en riesgo de contraer malaria.
Los antecedentes de la PrEP están en una estrategia similar llamada profilaxis de post-exposición (PEP), la cual se aplicaba a personas que habían contraído accidentalmente el VIH. Por lo que su uso se redujo a niños recién nacidos contagiados y trabajadores sociales que se habían infectado con agujas.
Posteriormente se descubrió que la estrategia PEP reducía el riesgo de contagio entre madres embarazadas y sus hijos hasta 60 por ciento.
Durante las pruebas realizadas con monos, los científicos descubrieron que al utilizar los antirretrovirales en animales sanos, se reducía el riesgo de contagio.
Hallar una vacuna contra el VIH ha sido un reto para la ciencia desde hace 25 años, cuando se identificó el virus.
Según New Scientist, ante dos intentos fallidos por desarrollar una medicina que previniera el contagio, se tomaron otras tácticas, como los microbicidas.
Se utilizaron medicamentos antivirales que se usaban en la vagina o en el recto, usualmente en forma de gel que se untaba antes de tener relaciones sexuales.
Se probó con el fármaco nonoxynol-9, sin embargo, provocó que la pared vaginal se irritara, además de aumentar el riesgo de una infección.
Las dificultades al probar vacunas contra el VIH es que implican demasiado riesgo. Los médicos tienen claro que la PrEP no es una panacea, pero podría ser un recurso provisional hasta que llegue la vacuna.
“Necesitamos tantas opciones como sea posible. No podemos estar sin hacer nada”, dijo Alan Stone, ex director del Grupo Internacional en Microbicidas.
fuente. EXCELSIOR
http://www.exonline.com.mx/diario/noticia/primera/temadeldia_nacional/¿pastilla_del_sexo_seguro?/468353